Yo distingo muy bien entre qué es calificar e qué es insultar. La RAE en sus primeras acepciones de ambas palabras lo deja bastante claro.
CALIFICAR dice que es: «Apreciar o determinar las cualidades o circunstancias de alguien o de algo.»
INSULTAR dice que es: «Ofender a alguien provocándolo e irritándolo con palabras o acciones.»
La diferencia es que calificar se ajusta a la verdad e insultar no, porque se hace para molestar y qué mejor que exagerar peyorativamente.
Las personas tenemos unas conductas a lo largo de nuestra vida, a veces buenas y a veces no tanto, por ideologías o cualquier otra influencia. Todos creemos que lo hacemos todo bien o somos unos psicópatas, porque hacer cosas sabiendo que son malas, a mí al menos, me cuesta asimilarlo.
Hoy en día tenemos las redes socialesy podemos, si es nuestra forma de aminorar los daños recibidos, expresarnos en ellas. Siempre será adecuado utilizar calificativos (ajustarnos a la verdad) y no insultos (falsedades para molestar).
Hay personas llenas de secretos y otras que no tenemos ninguno. Es muy saludable airear lo que nos daña y así nos lo dicen los psicólogos. Tragarse las cosas en silencio destroza por dentro. Recuerdo aquella psicóloga que en un terrible momento de mi vida me dijo: «Cuentalo, díselo a todo el mundo, las veces que necesites hasta que deje de doler». Así lo hice y un día dejó de doler, sí. Ahora me encuentro en otro terrible momento de mi vida y he escrito mucho en redes, he contado mucho por teléfono, en persona y lo haré hasta que deje de doler.
Mi reflexión la traigo porque en todo momento CALIFICO y en ningún momento insulto. Yo cuento lo que sucede tal cual es de verdad. Otra cosa es que se califique un hecho no ajustado a la ética, al comportamiento moral que se considera el correcto en ese aspecto.
Pero muchas personas ven los calificativos como insultos. Bueno sería que repasasen si sus hechos son inaceptables para ellas mismas si ven insultos donde sólo hay verdad.
Ejemplo: Si alguien te promete que te dará algo y nunca lo hace, decir que no tiene palabra o que ha mentido es ajustado a los hechos y un calificativo justo. Ya si lo ve un insulto indica que no tiene moral para ver que no es correcto mentir y faltar a la palabra dada, por tanto se ha de aceptar su actitud déspota como normal y ni nombrarla.
El diálogo privado o público consiste en buscar el consenso basado en la aceptación de los calificativos y, por tanto, no sentirse ni molestado ni insultado por que se sepa un comportamiento que ve normal.
¿Porqué ofende que se cuente la verdad si uno cree que se ha comportado bien? ¿O es porque sabe que su comportamiento, calificado con la verdad, es inmoral?
Para que no se sepa lo que uno hace mal lo mejor es no hacerlo o sino recibir de buen grado que todos sepan como uno se ha comportado de mal.
No somos santos ni demonios, tenemos de ambos. No queramos aparentar lo que no somos.
Este cartel lo he hecho para la difusión de la realidad de una enfermedad que la gente de la calle conoce poco.
Hay un artículo alemán muy bien explicado sobre esta enfermedad y el trato histórico inadecuado ha recibido. Es una enfermedad física con componente inflamatorio, inmunológico, mal funcionamiento de las mitocondrias celulares y virus que permanecen o retrovirus endógenos activados.
Hay muchos frentes abiertos de investigación y poca financiación. Está totalmente descartada la hipótesis maliciosa que la atribuía, sin ningún fundamento ni estudio serio, a algo psiquiátrico. Sin embargo muchos médicos,psicólogos, fisioterapeutas, continúan contaminando las redes y a la población con mentiras que llevan a dañar más a los enfermos.
Las personas afectadas van de un profesional a otro, desesperados buscando quienes les den credibilidad. La realidad hoy por hoy es que la mayoría de las veces acaban en los pocos médicos expertos privados, con informes que no son tenidos en cuenta ni para bajas laborales ni la incapacidad permanente cuando es necesaria. Lo mismo ocurre en el reconocimiento de la discapacidad por las comunidades autónomas, que no tiene un apartado específico para asignarle correctamente el % que tiene el afectado.
Al final ellos mismos van averiguando cosas, tomando esto o aquello siempre que no necesite receta médica, de farmacia o parafarmacia, que es un peligro por interacciones o efectos cruzados. Es la consecuencia de verse abandonados por quienes tienen la responsabilidad de ponerse al día en esta enfermedad que está ya bien claro es tan física como la enfermedad de Parkinson o la esclerosis múltiple, por poner ejemplos de los que nadie duda. Sí, hay implicadas citoquinas, cosas medibles, es una enfermedad orgánica totalmente.
Huye de cualquier profesional que te:
– Diga que es un problema psicosomático.
– Aconseje hacer ejercicio progresivo o terapia cognitivoconductual.
– Diga que no te pasa nada.
– Atribuya esta enfermedad a depresión o ansiedad.
– Diga que te va a curar.
– Desprecie y no quiera aprender más sobre esta enfermedad que está en plena investigación de sus mecanismos físicos.
Hay médicos que saben los criterios diagnósticos, el estilo de vida que es mejor para intentar no avanzar en gravedad, fármacos que están utilizándose mientras no haya un marcador diagnóstico y un tratamiento curativo.
Busquemos uno de esos médicos para llevar el control de la enfermedad, que si es preciso envíe a otros especialistas, pero sea el médico referente por el que todas las pruebas y tratamientos pasen. Si pides una segunda opinión y te gusta mas cambia de médico, si no quédate con el que estás, pero no vayas a dos a la vez. Evitar duplicidades terapéuticas sólo es posible con ese médico con quién tengamos una buena relación terapéutica.
Delegamos la ciencia en el blog de la dra. Marín (el enlace está en esa entrada) y nos acercamos a ella desde el punto de vista del enfermo y como vive esta situación tan difícil. Aparece en pocos sitios, a pesar de afectar a aproximadamente un 0,5- 1% de la población, y estamos deseosos de buscar información sobre ella.
Negada o minusvalorada por muchos médicos, parece que al ser multisistémica, el diagnóstico lo puede hacer fundamentalmente el neurólogo, el reumatólogo, el especialista de medicina interna o el médico de familia. Para esto tiene que tener una formación específica puesto que no se estudia en la carrera de medicina ni por muchos profesionales de estas especialidades.
Las enfermedades que no tienen marcadores más allá de los síntomas clínicos que contamos incomodan a muchos, más cuando la medicina evoluciona de antes hablar mas tiempo y explorar al enfermo a ahora estar mirando a un ordenador y solicitar muchas pruebas diagnósticas sin ni verle la cara a veces.
Esta enfermedad es orgánica, física (ni mental ni sensorial) aunque afecte yse afecte por todo ya que una persona es un todo indivisible. Ese todo es artificialmente separado en partes en las diferentes especialidades médicas y quirúrgicas con el objetivo de acotar y poder saber más de cada órgano o sistema. El problema es cuando eso hace perder la visión global del enfermo.
Toda enfermedad multisistémica es un gran reto. Las que tienen marcadores objetivos, un número en un análisis o una imagen diferenciadora en las pruebas de imagen, son enfermedades con suerte. No hay forma de decir que no existen, que son exageraciones o invenciones. Ya, pensarás que las hay muy graves, pero la suerte es que son comprendidas por médicos, familiares y la sociedad en general.
Esto lo entiendes muy bien cuando eres un médico que ha estado en el lado bueno de la mesa de una consulta y dejas ese lado para pasar al malo, a ser el enfermo involuntario de cosas que hasta te arrancan de tu ejercicio profesional. Un buen médico tiene que saber decir: «No sé», «voy a buscar ciencia sobre lo que le ocurre» y no niega nada como enfermedad por desconocimiento. Nadie sabe todo de una profesión compleja, es totalmente imposible.
La EM/SFC ahora se está beneficiando en su investigación de ser parecida o tal vez igual que el COVID Persistente. Esperemos que se encuentre un marcador medible que nadie pueda negar, que aparecerá pero no sabemos cuando. Porque está definida clínicamente y va siendo mejor tratada (aunque no tiene tratamiento curativo) por médicos que sí la han estudiado a fondo en lo que ya se sabe.
Los enfermos estamos muy agotados para buscar ciencia rigurosa pero nos encontramos entre nosotros. Y nos pasamos algunos datos aún sin saber el origen. Quiero aportar una tabla extraída de un metaanálisis (una forma de unificar los resultados de múltiples estudios) sobre la calidad de vida de nuestra enfermedad y otras graves. Me la proporcionó un enfermo.
La traducción de lo que he podido la he añadido yo
¡Peor calidad de vida que cánceres, problemas cardíacos severos, enfermedades mentales importantes, personas que necesitan diálisis para sobrevivir!. ¡Tremendo!. Además se puede tener varias enfermedades de las que hay además de la EM/SFC, ni imaginar ya entonces la bajísima calidad de vida. Pero mucha gente no se la cree, no está especificada como enfermedad diferenciada cara a obtener un % de discapacidad. Si se obtiene será calculada «a ojo de buen cubero y subjetivo».
Hay cuatro grados de gravedad establecidos por los expertos (no digo especialistas que es lo que tendría que ser) que la estudian:
El grado 1 son personas que no van a consultar por esto. Cualquier enfermo que consulta a un médico esto ya está en grado 2 o 3 como mínimo. Eso son discapacidades, estén evaluadas con % o no lo estén por las administraciones públicas.
Pero este enfermo tiene un aspecto físico excelente, nada hace pensar que pueda estar enfermo al verle. No puede con su alma y si no se quiere ver no se ve. De ahí la negación, infravaloración, desconocimiento, asombro, incomprensión de todos: enfermos de otras cosas, familiares, amistades, la población en general y médicos u otros profesionales sanitarios.
Por favor, que no lo diagnostique un psiquiatra, porque no es una enfermedad mental, es física. Por favor, que nadie diga que es sedentarismo y se necesita hacer ejercicio, porque eso ha hecho mucho daño. Un enfermo bien informado escribió esto y es la evidencia científica hoy por hoy
3 de cada 4 enfermos son mujeresHacer estas entradas me deja exhausta pero nos tenemos que ayudar
Tal cual, hay 12 escalones para subir al dormitorio de esta casa rural. Es un enclave en la montaña riojana en periodo de vacaciones.
¿Qué cosas he visto? Ni la aldea. Me paso el día agotada. Curioso que mi reloj deportivo me dice que tengo la batería baja (Yo, no el reloj) y que reduzca el esfuerzo, que descanse, porque mi estrés está elevado.
¿Cómo descansa y reduce el esfuerzo alguien que está casi todo el tiempo tumbado? No lo sé. Sé que esto se remonta más o menos a comienzos de 2020. Nunca he sido muy energética pero nada que ver con esta gran incapacidad que va a más.
Cuando vi la programación de vacaciones, que delegué al 100%, sabía que no eran posibles para alguien como yo, en mi estado. Un viaje de 10 días de «relax» y, con un único día entero en casa, otro viaje «para ver cosas». Ni conduzco ni hago maletas, nada, todo me lo dan hecho. Aún así pensé: Esto me va a matar.
Ni que decir tiene que no me he movido del sofá y las cosas las veo en las fotos que mi familia me va enviando. Estoy con mis dos perros y no puedo ni ponerles la correa para sacarlos. Descansar y más descansar sin conseguirlo, pensando en la valentía que me salió bien cara físicamente de hacer una excursión de una mañana a principio de septiembre e ir dos días, separados por una semana, al spa.
Es que ni cojo la Nintendo Switch nueva (bonito regalo, me encanta) porque ni ganas ni fuerzas para mirar un juego.
No es un problema de estado de ánimo, me siento bien de eso, me gustaría no parar de hacer cosas y la vida es hermosa. Viajar es algo saludable, muy saludable para quien goza de buena salud. El sol entra por la ventana, ayer vi una comedia en la televisión y me reía bastante. Hasta tengo estabilidad para intentar dejar de fumar en octubre, cuando vuelva a estar en mi casa.
¿Qué me pasa? Al ser médica me es un poco más sencillo encontrar información útil online. Aunque nadie puede ser objetivo consigo mismo, veo que existe una enfermedad llamada encefalomielitis miálgica o síndrome de fatiga crónica con unos criterios del CDC de 2015. Cumplo todos los criterios, a falta de descartar otras cosas, pero sabiendo que mis análisis son perfectos.
Pendiente de lo correcto, tener un diagnóstico hecho por un médico experto, hay un blog imprescindible de leer sobre esta enfermedad entre oculta, desconocida e incomprendida. Porque te ven con un aspecto físico maravilloso, buena cara y pareces la persona más sana del mundo.
El blog es de una doctora de los pocos que se han preocupado por ver esta patología muy invalidante como algo físico, porque estamos hartos de que todo se meta al cajón de sastre de «Eso es psicológico» cuando no se conoce, no tiene un marcador conocido que se vea en números, no se han tomado el interés de tomársela en serio.
Espero que os sirva esta entrada, porque es posible que conozcáis a alguien que esté así y se sienta perdido, más si algún médico le ha dicho que haga ejercicio porque es lo que necesita. Para esto el ejercicio no sirve, empeora. Tendríamos que medir consejos y opiniones mejor.
Cuando buscas información sobre las parejas que se casan teniendo hijos de matrimonios anteriores, encuentras mucho material sobre niños y convivencia. Muchos temas sobre custodia, sobre influencias de los padres biológicos que interfieren en la relación de los niños con el padrastro o la madrastra. Todo infantil.
Una figura esencialmente altruista, que da cariño y cuidados a hijos que no son suyos y además sin ninguna obligación. Las madrastras y padrastros, gente que arriesga mucho al entrar en las llamadas «familias ensambladas»,son la máxima expresión de amor a sus parejas.
Flaco favor han hecho los cuentos y las historias de diferencias entre hijastros e hijos en el matrimonio. Sin embargo yo lo que he visto es que consentían mása los hijastros que a los hijos propios, justo para evitar que pareciera lo contrario. Ni podéis imaginar la cantidad de madrastras angustiadasy con ganas de hacer las cosas bien que hay y llenas de problemas para conseguirlo.
No vas a encontrar casi nada de hijastros adolescentes y prácticamente nada de hijastros adultos. Adultos que convivan o no, el tema queda sin hablar, como si no se generara ningún problema, como un tabú. Pues ahondando también en familias ensambladas con hijos adultos la frase inicial se da y por eso vamos a sacar información de lo que los demás no se ocupan.
Y vamos a repetirlo así, especificando todo:
«Los hijos anteriores a la relación (niños, adolescentes o adultos) son de las causas más comunes de problemas entre la pareja»
El éxito en un matrimonio con familias compuestas es posible cuando nos educamos acerca de las segundas familias, y desarrollamos habilidad en la relación para resolver conflictos entre los individuos de la misma.
Problemas en la relación con un matrimonio en edad avanzada y celos con hijastros:
• Las parejas que se casan en edades avanzadas a veces tienen que negociar el tiempo con sus hijos de relaciones anteriores, y la comunicación y la aceptación pueden ser un reto.
Establecer límites:
• Las relaciones tienen que ser alimentadas. El tiempo y la atención son necesarios para mantener el enlace vivo.
Sé honesto financieramente:
• Cuando te cases en edad avanzada, es probable que tengas un cierto grado de independencia financiera.
• Puedes entrar en la unión con los activos que desees mantener aparte. Precisa las obligaciones financieras de cada compañero para que no haya confusión.
• Incluye los salarios, las pensiones, bienes raíces, manutención del cónyuge y de los hijos en tus discusiones.
Negocia tiempo familiar:
• Fiestas y celebraciones posteriores en la vida pueden parecer una maratón al correr para dar cabida a las expectativas de todos.
• Las parejas que se casan en edad avanzada pueden establecer sus propios rituales.
Da espacio a los hijos:
• Adaptarse a un nuevo matrimonio llevará tiempo y mientas más jóvenes sean los niños, más tiempo será del período de regularización.
Cómo lidiar con los hijos adultos difíciles (de tu pareja) en un segundo matrimonio:
• Los segundos casamientos a veces son desafiantes al lidiar con los ex y los niños de los matrimonios anteriores.
• Cuando los hijos son ADULTOS, LOS DESAFÍOS SE PUEDEN AUMENTAR (Sí, pone AUMENTAR) ya que no tienes ninguna autoridad real sobre ellos así que pueda ser un problema conseguir que te respeten.
• Tratar con los hijos adultos difíciles en un segundo matrimonio requiere de la cooperación y el apoyo de tu pareja.
• También necesitas ser paciente y diligente, porque estos asuntos nunca se resuelven de la noche a la mañana.
Esto te interesa: ¿Qué tipo de padre eres?
TIPS (para madrastras o padrastros):
• Habla con tu cónyuge (el padre o madre biológico). Es vital tener su apoyo al tratar con los hijos ya que él está en una posición de autoridad. Si no te apoya en esto, es muy poco probable que sus hijos te demuestren más respeto.
• Dirígete a los hijos con un tono de voz amable pero firme durante las disputas. Aunque es importante tratarloscon respeto, especialmente ya que son más grandes y maduros, no deberías ser un felpudo para ellos tampoco.
• Establece con tu cónyuge que no se permiten ultimátum.Los hijos nunca deberían ponerlo en una posición donde tenga que elegir entre ellos o tú y no debería tolerar ningún intento por parte de sus hijos de hacerlo.
• Asimismo, también evita el ultimátum de tu propio respeto por parte de tu pareja.
• Establece límites con respecto a tus interacciones con los hijastros adultos. Esto significa no permitirles que interrumpan el tiempo entre tú y tu pareja y no aceptar un comportamiento grosero o condescendiente. La consistencia es la clave.
• Pasen tiempo juntos como una familia para que los hijos adultos (de tu pareja) se acostumbren a ti y a tu cónyuge juntos.
• Esto también les da la oportunidad de ver cómo ellos se comportan hacia ti, tu cónyuge y entre sí. Cuanto más tiempo pasen juntos, es más probable que ellos comiencen a aceptarte y se vuelvan menos problemáticos.
AGOSTO 19, 2013
Sacado de:
[Hijos adultos que celan el tiempo y dinero de sus padres solteros. Un problema frecuente al formar nuevos matrimonios en la edad avanzada o adulta es el conflicto con los hijos de nuestra pareja. Los problemas varían según la edad, cercanía y relación con el padre. Manéjalos así.]
El siguiente artículo sirve para hijos adultos que se han quedado anclados en la adolescencia (muy propio del siglo XXI):Mi madre tiene otra pareja. Como actuar.
Espero que esto sirva para tener familias compuestas de parejas más o menos mayores, con hijos adultos de matrimonios anteriores, llenas de armonía y sin problemas, que necesitan tranquilidad y cariño de quienes les rodean, seanhijos o hijastros.
El sol calienta. Hay fuentes manando agua clara. En fin, la historia es una maestra. La ciudad contiene nuestro hogar. Es imprescindible hablar del lenguaje. Mismo idioma y distinta expresión. Si yo lo tuviera, las dos hijas no lo creerían. No bacilo si no es por ti. No sé explicarlo mejor. Qué bonitos son los dos caballos. Lo que pretendíamos es sujetar la vida. La humedad alimenta a los helechos. Lo cierto es lo mismo que yo no quiero. Ese árbol está enfermo. Pero en la calle están jugando a la vez ¿a qué?.
Ahora sí que tocas el tema. Bullicio en las plazas. Si quieres que lo hagamos, yo te aconsejo. Qué difícil convivir en silencio. Lo único es que no sé calificar eso de la manera más sencilla. ¿Qué lugar es este? No obstante me puedes poner una dirección para poder usar mi mano. Yo señalo mejor hacia arriba.
Ellos son los más importantes y los que han estado en el mundo. Nosotros vinimos de la inexistencia. Estamos a su disposición por cualquier duda. Todos lo caminos llevan al mismo sitio. Saludos cordiales y muchas gracias de antemano. No sé porqué digo algunas cosas. Espero tu contestación para saber cómo proceder. No se aclaran si ir o no.
Ya me conocía de alguna manera. Apagemos la luz que es de día. Me siento tonta con mi voz. Haz caso a los semáforos o te multan. No quiero ser un problema para nada de lo básico. La hora en punto tiene campanadas. El futuro del mundo dentro de mi cabeza es el que ya me ha pasado. ¿Cómo lo sabes? Lo único que hay es un fenómeno de los años que tuve. Tanta montaña es hermosa. En cuanto a enseñar la idea del proyecto que nos ha quedado, no sé. Un camino de tierra para pasear. Pensando en la posibilidad de hacer algo, si estás interesado es hoy cuando nos señalan a nosotros.
Juzgan por los pelos, es como si fueran un poco menos del tema. Fuera y dentro de la cabaña hay diferente temperatura. Pero no tengo nada. Ojalá volara como un pájaro. Esta semana te paso el resumen. La mente da vueltas. Lo único malo es cuando me digas algo que te parece bien. Por favor. Hay una lata de cerveza medio vacía. Te pido disculpas si lo tuviera que hacer. No me acaba de agradar ese grupo. No obstante me gustaría saber como puedo solicitar la reserva. El incendio empezó allí. Gracias de nuevo pero el resto es por nuestro deseo. ¿Cuanto cuesta esa camiseta?
La luna está a veces también de día. En realidad es lo sensato. Se te derrama lo de la bandeja. Y venía precisamente por eso la situación. Hay que hacerlo con cuidado. Me han llamado para saber que tal ha llegado el pago. ¿Me traes mi tabaco? Si pudiera lo diría de nuevo a través de este medio. Siguen pastando los dos caballos. Aquí te dejo mi parte. Las nubes se desplazan rápido.
Todos en la vida tenemos momentos felices y también otros muy duros de pasar. En ocasiones hablamos con alguien, nos desahogamos. Si perdemos los papeles, nos entra ansiedad, temblamos y lloramos indefensos, por un suceso muy desagradable y podemos tener reacciones diversas en nuestro confidente.
Me ocurrió cuando sufrí la estafa de mi tarjeta Visa en internet. Entraron los mensajes al teléfono, llamé para anular los cargos o anular la tarjeta o ni sé bien qué para intentar solucionarlo. Era por la tarde y mi pareja tenía previsto venir y quedarse a dormir como muchas otras veces. Yo apenas había acabado la llamada, que ni recuerdo, y había sacado el Licor 43 para ponerme un chupito, a ver si me tranquilizaba un poco.
Esperaba para no estar sola, porque mis perros me miraban como cuando se dan cuenta de que realmente te sientes mal. Sonó el videoportero y abrí sin ni hablar por el telefonillo. En cuanto estuvo en casa se sentó en el sofá a mi lado, con la cara muy seria. Me cogió la mano y yo me apoyé en su hombro para llorar. No era tanto por el dinero como por darme cuenta de la inmensidad de la red y la desnudez en materia de datos que hay. Era como estar al borde de un precipicio y a mí las alturas me dan mucho miedo.
A su entrada, entre sollozos, le había contado lo ocurrido. Tampoco recuerdo eso, ni lo que al día siguiente me dijo: «Estabas todo el rato repitiendo lo mismo, no entrabas en razón». Y es que se fue a su casa a dormir, poniendo de excusa que para trabajar el día siguiente necesitaba otra ropa diferente. Pero en el recibidor había dejado una bolsa al entrar, en la que llevaba todo lo necesario para quedarse la noche. Cómo me vio así la había dejado fuera del salón, no necesitaba entrarla más dentro de casa para lo que iba a hacer.
Allí me quedé llorando asombrada, abandonada. Al día siguiente le envié un WhatsApp diciendo teníamos que hablar de la coraza que se ponía ante las emociones tristes y tensas de los demás. ¿Qué creéis que respondió?
La respuesta era larguísima, curioso para alguien que está trabajando y no puede parar. Con mucho enfado que yo le había ofendido gravemente al decir que se ponía coraza, que me había atendido bien. Decía que yo repetía y repetía lo mismo y no había sido capaz de hacerme entrar en razón, porque al día siguiente se resolvería y no tenía importancia. Lo había pensado y me dejaba, porque si yo tenía tiempo de ir ayudando a la gente no era su caso: «Cuando salgo de trabajar sólo tengo tiempo para ser feliz».
Aquello que se solucionaba al día siguiente, según su versión, ha tardado un mes en estar solucionado por el banco tras varios trámites y porque he tenido suerte, podía no haberse solucionado, falta la parte judicial mas lenta y me he quedado sin pareja.
Está de moda no implicarse en los problemas de los demás. Te dicen lo que tú quieres oír, de preparar la convivencia, de estaremos siempre con este amor, más mentiras y no es que una sea tonta… Estás enamorada y te vendas los ojos para no ver la realidad.
Está de moda no dar la cara para cerrar algo que se ha abierto en persona y con proximidad. WhatsApp sirve para dejar relaciones serias (eso cree una) con un mensaje escrito y acto seguido, de una forma pueril, el bloqueo. Yo, que aún tengo gusto por el trato personalizado de sentarse a una mesa y dar la mano cuando vas a algún comercio u oficina. En la vida privada, que aún tiene que tener un trato mucho más cuidado y lleno de respeto, me encuentro con esto, que es una falta de educación, ética y mínima empatía tan grande como el Titanic.
He de decir que tengo buenas amistades, pero el teléfono móvil y sus redes sociales se han hecho dueños de nuestras vidas. Nos vemos mucho menos, se pierde en comunicación.
También antes mirabas a una persona a los ojos y tenías referencia de si era buena gente o no. Ahora, todo lo que se está perdiendo en calidad humana interna, se está mejorando en picardía, interpretación teatrera de falsedades, maldad. El siglo XXI y ya el final del XX han llevado a consumir personas igual que se consumen electrodomésticos o aparatos electrónicos. ¿Un problema en el televisor? Lo tiro y me compro otro. ¿La pareja tiene un traspiés y llora? La tiro y me busco otra. Muy triste forma de vivir que nos hace daño a quienes funcionamos con los principios y valores de nuestros padres: «Lo bueno es lo que dura», «si está triste llorando se queda uno hasta que esté mejor» y «las cosas hablándolas se entienden».
¿Sabéis que hice cuando me quedé abandonada sola esa noche de incomprensión y egoísmo? ¿Cuando por última vez vi a quien creía mi pareja para siempre?
Lo que hacía cuando era jovencita, escuchar música. Pero ahora me puse a ver DVD y Blu-ray de Conciertos de Michael Jackson. Todo lo que tengo de él en mi casa. Su extraordinaria amabilidad en This is it… esa es la idea de la educación, cariño en el trato, comprensión, que yo quisiera fueran lo habitual entre las personas.
Michael ensayaba una y mil veces, hasta que pareciera espontáneo todo lo que hacía: bailar como nadie, cantar como un ángel, ser el Rey, porque para mí los reyes se hacen por sus méritos, no nacen hijos de la nobleza monárquica. El artista que más ha donado para caridad de todos cuantos hay. Como no quería dar entrevistas la prensa le vapuleada a cambio. Fue incomprendido como persona por muchos, como persona de alta sensibilidad PAS (tenéis una entrada en el blog de ese tema), eso se veía sin necesidad de tests. Le ocurrió que ser especialmente brillante crea envidias y enemigos. Un impresentable de mi profesión, que me da vergüenza ajena, le mató, porque este mundo mandado por el dinero, valoraba que muerto se le sacaría más que vivo.
Recuerdo los dibujos animados de los Jackson Five, como siempre desde ese tiempo, ha estado en mi vida. Sin remedio necesitamos mitos, la realidad es demasiado cruda para llevarla sin música, sin arte, sin quienes subimos en nuestros pedestales, sin fallarnos nunca.
Da igual si me bloqueas en WhatsApp, sigo siendo muy valiosa porque sé amar, acompañar, he dedicado mi vida a cuidar profesionalmente a los demás y lo he hecho bastante bien. Soy yo quien se tiene que mirar al espejo del alma cada día y gustarme. Si eso hace que sea más fácil sufrir de vez en cuando también me gusta ayudar a la gente y comprenderla. Yo no huyo, yo sé compartir. Es lo que me gusta, me emociona y me ilusiona.
Quien me despidió con un WhatsApp, antes me había animado a publicar mi libro «Pasas como el azar». No está para verlo hecho realidad, para encontrar que alguna poesía está escrita para mi Rey, Michael Jackson. Normal, siempre ha estado y estará, porque demasiadas personas entran en nuestra vida y pasan como el azar… Michael no.