¿JORNADA DE REFLEXIÓN?

Antes de hablar de ella situemos en el contexto mundial este día

Diario El País

Diario La Razón

La verdad es que no conozco a nadie que reflexione su voto el día anterior a las elecciones, sean las que sean, así que el nombre no es muy adecuado. Sí es casi poético y no sé a quién se le ocurrió, porque me parece bonito y positivo el hecho de invitar a pensar. Al fin y al cabo reflexionar es pensar. La filosofía es la que nos enseña y lo hacemos muy poco, los occidentales no somos dados a pararnos, siempre huimos hacia delante porque tenemos miedo a la introspección y lo que podamos encontrar con ella.

¿Existe un día mundial de la reflexión? No, porque todos los días mundiales de lo que sea, en realidad, se dedican a reflexionar sobre el contenido del tema que representan. Todos los días del año estamos invitados a pensar y buscar soluciones a algo. Y no nos damos cuenta. Hablo de la reflexión individual mirándonos a nosotros y nuestra relación con el mundo en el día de algo. Hay demasiados «días de» y la consecuencia es no enterarse más que de los que los medios de comunicación y los organismos con poder financian. Lo que más se hace en esos días son cosas para recaudar fondos o reivindicar derechos.

Reflexionar antes de un acontecimiento político, donde vamos a decidir entre todos los españoles (los que tienen derecho a voto) cómo se va a legislar y gobernar nuestro país los próximos 4 años… Tiene que llevarnos a darnos cuenta de que esto influirá en la vida de absolutamente todos, interesados o no en la política. La consecuencia es que si algo va a influir en tu vida, vayas a decir qué quieres, vayas a votar. La abstención no es sólo castigar a los partidos políticos para que no cobren el dinero en función de cuántos votos reciben, excusa de bastante gente descontenta y decepcionada. La abstención en realidad es dar más peso a los votos que sí se ejercen, con lo que puede llevar a cambios en los resultados. Cuando te abstienes dices que ganen los partidos políticos que menos abstención tengan, no votas pero de alguna forma sí votas porque favoreces. Sueles favorecer al que tiene la ideología más lejana a la tuya, dicho mas claro, tiras piedras a tu propio tejado. Tu inacción va contra tí, tú verás si eso te conviene.

Si no tienes el que mas te gusta sí tendrás el que menos, seguro. Votar el mal menor es una forma más de hacerlo. Nadie estamos exactamente en una ideología en todo, sobre todo si sabemos pensar. Los partidos tienen programas electorales, no suelen cumplirlos enteros, hay una parte en todos que es «estrategia comercial» para captar votos. En esta vida se funciona así; si se busca una pareja, por ejemplo, no se enseña lo malo de uno sino lo mejor. No vas a encontrar a quien te guste y decirle «Soy muy desordenada en casa» (yo lo soy ja ja), le dirás más bien «Soy sincera y me gusta pasarlo bien» (que vea el desorden más adelante).

Hay estudios por ahí que dicen: la mayoría de la gente vota pensando en su economía personal. Pues está bien, porque por mucho que se sea como yo, que pienso «Lo más valioso de la vida no se puede comprar con dinero»… en las tiendas me cobran lo que necesito en dinero y si no tengo suficiente me voy sin el artículo, sea una barra de pan o un cochazo.

El más rico de España es el señor Amancio Ortega. 63.000 millones de euros tiene si no recuerdo mal y el último año ha ganado 5.000 millones. Yo soy pensionista y cobro solamente de la Seguridad Social (no cobro ningún plan de pensiones privado). El, seguro, vota según sus intereses, yo hago lo mismo según los míos. Los dos votos se recuentan y si uno no va a votar le da más poder al del otro. Suficiente motivo para hacer el pequeño paseo y en unos 10 minutos hecho, esfuerzo cero.

El trasfondo de esta jornada creo que es evitar conflictos, ya que se instauró en la transición de la dictadura al sistema actual. A los candidatos, que se han pasado unos días gritando en los mítines (no me gustan ni creo que sirvan para nada si van los suyos) les va bien descansar para tener voz si ganan las elecciones. Para mí sirven los programas y los debates. Los carteles y buzoneo son gastar papel de forma inútil.

Mañana tenemos que ir a votar y por la noche a mí me toca informarme de lo que ha dicho el pueblo español. Mi deseo de paz y que se pueda votar sin problemas en todas partes.

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HARTOS DE IR A VOTAR PARA NO TENER UN GOBIERNO

Ayer se dió la noticia más mala en la política española que podía ocurrir. En noviembre habrá nuevamente elecciones generales en nuestro país, tras el estrepitoso fracaso de las negociaciones para formar gobierno.

Los presupuestos generales del Estado de la época del PP, que ya se prorrogaron un año ahora se han de utilizar un año mas. Surgen muchas dudas, porque nos explican que habrá una semana de campaña en lugar de dos para ahorrar. El hecho es que nadie discute de los políticos que no haya dinero para pagar unas elecciones ni que lleven muchos meses cobrando sus sueldos para acabar en nada. Eso no se discute, sí se va diciendo ya que, sin nuevos presupuestos, lo más posible es que la subida de las pensiones sea solamente del 0,25%.

Una llega a pensar, por lógica, que hay dinero para lo que se quiere y no lo hay para lo que no se quiere. ¿A estas alturas algún español necesita campaña electoral? Hemos visto muy bien en los últimos meses a cada partido, sus movimientos, sus exigencias, barbaridades a veces, anhelos de puestos de poder… El partido con más historia de los cinco que se presentan en todo el estado y logran más escaños, muy lejano a sus inicios, con los que casi únicamente coinciden las siglas, aislado. Supongo que es duro ganar unas elecciones, tener una historia de ser los mas dialogantes, y no lograr que alguien facilite que gobierne.

Pedro Sánchez tiene detrás de sí la experiencia de que sus compañeros de partido le echaran de malas maneras y reconquistar el liderazgo desde las bases del partido. Lograr ganar por primera vez en la democracia después de la dictadura una moción de censura. Presentarse a unas elecciones después de esto y ganarlas. En los meses del gobierno de la moción ha tenido el apoyo de Unidas Podemos. ¿Qué ha pasado ahora para no tenerlo cuando ha hecho el ejercicio de abrir el programa de gobierno al programa de UP en gran parte?

La desconfianza entre los partidos de izquierda y con ella el pedir más aquí y allá, lo que hace es empeorar la economía para todos los españoles del primero al último. Todos sabemos que manda el dinero y los poderosos más que los gobiernos, mientras la mayoría de ciudadanos tragamos carros y carretas. Pero hacernos aguantar unas nuevas elecciones por no saber negociar y ceder, es excesivo. ¿Quién se beneficia de que no se haga ni una ley en muchos meses? Yo no lo sé, me gustaría saberlo para ver si puedo entender que dos partidos tan afines, en teoría, no sean capaces de hacer viable la estabilidad política de nuestro país. Que yo sepa tanto PSOE como UP están en el espacio de la izquierda. Las tres derechas sí se ponen de acuerdo y esa misma izquierda en la Comunidad Valenciana, por ejemplo, también. ¿Porqué al nivel nacional no? Algún personaje lo impide y no digo quién aunque lo sospecho.

No sé que van a hacer cuando vayamos a votar y lo hagamos igual, porque yo no conozco a nadie con intención de cambiar el voto excepto alguna persona que votó a Vox y va a votar al PP. No les vamos a decir mucho diferente en las urnas, les vamos a decir que las mayorías absolutas se acabaron y que la política es, como su significado, servicio al ciudadano y por tanto hacer acuerdos sin pensar en cuanto se ganará según el puesto que se ocupe. La cárcel ya va viendo entrar políticos que se apropiaron de lo ajeno, así que toca trabajar de verdad como hacemos los demás. Si no se ponen a ello, si no nos dan un gobierno que no esté sólo en funciones muchos meses, puede que nos demos cuenta de lo poco que hacen.

Sistemas políticos que no funcionan llevan a otros diferentes, aunque no veo a los españoles con ganas de hacer revoluciones. Más bien veo pasividad con lo que quienes vayamos a votar, los incansables, tendremos más responsabilidad en los resultados. Una tiene que ser mejor que los políticos y aunque ellos fallen, como votante una no falla. Si ellos no saben o no quieren pensar y ponerse de acuerdo, les vamos a votar para que acaben haciéndolo.